No te conviertas en BRIDEZILLA

A petición de varias de ustedes, les traigo un poco más extenso el tema del que ya había hablado en mis redes sociales sobre como no terminar siendo toda una Gruñona (Bridezilla) durante la planificación y peor aun, en el día de la boda.

- ¡No se que me paso! - Si, eso es lo que siempre me dicen cuando me cuentan todo lo que tuvieron que vivir durante el proceso de su boda y también las torturas que les dieron a sus familiares, amigos y al pobre novio. Lamentablemente para las que ya lo hicieron no hay vuelta atrás; pero para mis tortolitas que aun están en la etapa del compromiso o que les quedan un par de meses, todavía hay tiempo para remediarlo.

Se que quizás te estarás preguntando: -¿Que querrá decir Vanessa con esto de Bridezilla? pues que no te asuste no es nada que no tenga solución. Simplemente se trata de una forma graciosa de decir cuando una novia es Gruñona y Pesada porque se encuentra estresada y al limite de la locura por toda la presión que genera la organización de la boda. Esta palabra viene de la combinación de (Bride= Novia en Ingles) y (Zilla= como el diminutivo de Gozilla). Pues si, No estoy exagerando pueden generar mucho miedo y causar tanto caos como el mismísimo Gozilla en su película estas chiquillas. 

Si no quieres sentirte identificada para nada con una Bridezilla, Corre! si Corre y busca tu agenda planificadora, un lápiz y empieza a afilar la punta que aquí voy con todos los consejos para que tu no te conviertas en la temible monstruo de tu propia boda. ¿Estas Lista? Empecemos:

1. Relájate! No permitas que el perfeccionismo evite que disfrutes los pequeños detalles, al final del día, muchas de las cosas que más recordarás en el tiempo son las cosas que no salen como las planeaste. ❤ No me malentiendas, planea todo lo que puedas y organízate, pero no permitas que pequeños inconvenientes arruinen tu gran día, porque esos también serán parte de tus recuerdos y probablemente en un par de años serán las anécdotas que más te hagan reír.

2. Delega. Tu futuro esposo, hermanos, padres, amigos, damas y nueva familia, seguro están tan emocionadisimos como tú con la boda y dispuestos ayudar, obtén toda la ayuda que puedas de ellos, dales un voto de confianza, entiende desde el principio que no lo tienes que hacer todo tú sola. 

3. Se realista. El presupuesto es una de las razones que más provoca que las dulces novias se conviertan en tremendas #Bridezillas.  Mi sugerencia para ti es que no te vuelvas loca gastando en una boda que no puedes pagar, recuerda que la boda es solo el comienzo de una vida juntos, la celebración de su unión; pon los pies sobre la tierra y planifica un presupuesto realista para tu  boda soñada, que puedas pagar y que permita que empiecen su nueva vida con el pie derecho y sin incómodas situaciones financieras. 

4. Planifica. Contrata un Wedding Planner, créeme cuando te digo que tu vida será más sencilla. Una Wedding Planner tiene experiencia en muchas de las situaciones que te estresan y saben reaccionar positivamente cuando las cosas se salen de control.

"Disfruta cada momento de este proceso y permite que todo fluya. Recuerda que este recorrido se trata de ti y tú pareja hasta el altar y el preludio de una vida juntos, así que toma las medidas necesarias para  que tus nervios no te traicionen y confía, que todo va salir bien". 

¡Excelente! Ahora ya sabes lo que tienes y no tienes que hacer para no terminar como ya sabes quien. Así ya que estas lista para continuar trabajando en tu boda.

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